sábado, 28 de enero de 2012

INTERNET AGONIZA?

La internet que conocemos esta cambiando, nuevas reglas de juego se plantean para bien de algunos y mal de muchos. No se como terminará esta historia. Me parece bien  que se castigue la piratería, que se respete el derecho de autor, pero la letra chica de estas nuevas reglas es poco clara.

Imagino que hay grandes cerebros ( los famosos "nerds") de ambos lados y como se dice en buen criollo: "hecha la ley, hecha la trampa". Pueden poner mil controles, pero siempre queda un lado fácil de flanquear, como contener un líquido en un envase pinchado; y en medio de los dos bandos de genios, estamos nosotros, la gente común que disfruta comunicándose con amigos y familiares a traves de redes sociales, mirándo videos, escuchando música, leyendo un articulo de interés o simplemente buscando algún tipo de información, entraremos en la categoría de "sospechosos" por esto?

También imagino; siendo mal pensada; que un grupo pequeño de "poderosos", quiere adueñarse de este universo cibernético, que ha cabalgado durante años como un potro salvaje sin control y sin amo. Tal vez creen que ha llegado la hora de poner la casa en orden y colgar en la puerta un cartelito que diga: "nos reservamos el derecho de admisión".

Y me pregunto: por que ahora? La piratería no es algo nuevo. Estos sitios, que están siendo investigados y/o cerrados, llevan mucho tiempo existiendo, ofreciendo sus servicios y lucrando con ellos. Por que se esperó tanto tiempo? Por que los dejaron crecer tanto?

Ahora bien si realmente la internet cambia, como esta pequeña mente que suscribe cree, tendrá un lado positivo: recuperaremos el disfrute por el aire libre, los paseos, sacudiremos las telas de arañas de las bicis, los adolescentes pondrán su caritas al sol, se reunirán con amigos en vez de hablarles a traves de una pantalla, e incluso estarán expuestos a menos peligros. No suena tan mal.

Una modesta internauta

lunes, 9 de enero de 2012

HISTORIAS DE VERANO

Sigo en MDQ, y pienso que cambiada esta, como se convirtió en una enorme metropoli sin control, las cosas lindas se entremezclan con las feas, las luces con la oscuridad, el silencio con el bullicio, el rojo del semáforo no le importa a nadie, convirtiendo el simple hecho de cruzar una avenida en una verdadera aventura; pero es verano aquí, y se vive intensamente.

Faltaban dos días para que el 2012 arrancara, pero ya había bastante gente que adelantó sus vacaciones para no perderse la fiesta del Dakar, que fue un espectáculo impresionante.

La tarde era perfecta, excelente temperatura, poco viento y las playas de Mogotes ya estaban muy pobladas. Acompañé a las chancletas al balneario del ACA y nos ubicamos cerca de la costa, el guarda vidas en este balneario es una joven de cuerpito pequeño, bronceado envidiable y diminuto bikini, acompañada de un mini snawzer, que me hizo reflexionar: si un ballenato como yo requiere asistencia por haberse alejado de la costa haciendo la plancha, tendría la fuerza suficiente para llevarme a lugar seguro? Rápidamente esa duda fue disipada...

La marea estaba bajando, y en determinado momento su garita de observación quedo alejada de la costa, solita se fue abriendo paso entre los veraneantes, para acercar a la orilla la estructura que contiene el salva-vidas y un rollo interminable de soga color naranja chillón, en ese momento una docena de pachorrientos hombres con panza cervecera comenzaron a tomar la posición típica del mirón, o sea, algunos parados de brazos cruzados, otros despanzurrados sobre una silla payera, observando la destreza de la joven que, marcha atrás, movía la estructura.

Pero no quedó ahí la cosa, los machoides esperaban más y fueron complacidos: ya que luego le toco el turno de mover la garita (una plataforma alta de un m2) que si bien no parecía pesada, si era aparatosa. Los mirones, que para entonces ya tenían un hilo de baba en las comisuras, solo observaban libidinosamente a la joven, ninguno de ellos tuvo la caballerosidad de ayudar, o aunque sea realizar el típico amague masculino: “necesitas ayuda?”.

La guarda-vidas una vez que se ubicó en un lugar donde tenía mejor visión, acomodo su perrito, su silla y continuó con su trabajo, los gordos volvieron: algunos a su pachorra, otros a escuchar los monologos de sus mujeres mientras tomaban mate, otros al molesto tejo playero, mientras yo me dejaba llevar por la corriente, confiada, mar adentro, haciendo la plancha....


jueves, 5 de enero de 2012

NACHITAS ARGENTINAS

Como diría Crónica TV: “Estalló el verano” y Chechu se largó con su primer post, tranquila y relajada haciendo casi nada, despanzurrada al sol como lagarto de desierto.
Y el hacer nada suele hacer que una fije su mirada criticona en todo lo que se mueve.

El arco iris esta pintado en la playa, la pereza y el descanso son los reyes de estos días, y entre todos los personajes pintorescos que damos color al verano, están ellas: mujeres de cuerpos tallados en cerámica aguada y floja, con sus ansias de mostrar sus nachitas a Febo. Comencé a mirar cuando una de mis chancletas dijo en tono criticón con carita de asco: “muchas mujeres se miran como les queda la malla solo por adelante, de atrás lastiman los ojos” y la verdad tiene razón.

De todas la edades, lamentable en las mas jovencitas, portadoras del “Síndrome de Royal” (si se mueve tan tan, si se mueve tan tan...), nachas feas, caídas, poceadas, cuerpos descuidados, y otros con notables signos de la dieta "me lo como todo", mostrados al mejor estilo tapa de revista “7 días” de verano, y con la seguridad que da cuando lo que mostrás es perfecto y armónico (solo para un espejo distorsionado).

Mujeres, en quienes,  apenas puede distinguirse una minúscula tirita de tela de fuertes colores, perdida en la inmensidad de un cuerpo sin control, caminan, corren, te pasan por delante, tan cerca, que ni la mas pálida estría queda sin verse. Ni te cuento cuando esos enormes cuerpos con diminutas tanguitas se recuestas boca abajo dando la sensación de una enorme mole desnuda,. Si, llaman la atención, pero solo por mal gusto, falta de estética, o simplemente demostrar el: “me importa un pito, yo me la pongo”.

Hoy aún, se las ve con tono blanco lechoso (típico color de esas partes del cuerpo, que nunca vieron el sol), pronto pasarán al rojo camarón, para luego ir tomando ese bronceado dorado que todas buscan y pocas alcanzan. Y Febo quemará esas nachas, como cumpliendo deseos de tener un culo quemado y soñar (tal vez) con ser esa chica de tapa de cuerpo escultural color bronce, sin imaginar, que muchas rozan con el ridículo.

Aclaración: la que suscribe es fiel defensora de los cuerpos naturales y formas redondeadas, por considerar que una mujer de grandes curvas puede ser femenina, elegante y seductora sin necesidad de caer en el mal gusto.